22 de agosto de 2008

La oportunidad perdida, su sentido

Por supuesto, la vida está llena de posibilidades. No nos hemos acostumbrado a la última decisión tomada cuando tenemos que volver a decidir ante una nueva oportunidad:¿salgo hoy con mis amigos? ¿llamo al chico que me gusta?¿hago ese viaje?
Por supuesto, no todas las oportunidades poseen el mismo valor, no todas conllevan los mismos riesgos o suponen un "añadido" a lo que ya teníamos. En definitiva, no todas las oportunidades suponen una pérdida.
Sin embargo, la oportunidad perdida es aquella que lamentamos. Aquella ante la que hemos tomado una decisión pero que con el tiempo advertimos que quizás no fue la más adecuada. La oportunidad perdida es el "y si hubiera" mental. No se trata de algo inadvertido, invisible. Al contrario, es una circunstancia conocida, una propuesta "meditada" y, cómo no, una decisión que sin tener que ser equivocada nos intranquiliza y recorre nuestra mente en busca de una vía para volver a trás...to try again. En la mayoría de los casos no es posible, la vuelta atrás no significa que el valor de esa oportunidad conserve su propiedad original y como dice el proverbio: no hay vuelta atrás.

4 comentarios:

Shidermo dijo...

Es muy interesante lo de la oportunidad perdida, muchas veces el miedo nos atenaza y no nos permite hacer las cosas que deseamos. Parece que el miedo a perder algo es más fuerte que la ilusión de ganar algo. Pero las investigaciones dicen lo contrario, nos solemos sentir peor ante oportunidades perdidas que ante cosas que hemos hecho que han salido mal (es imposible fallar porque siempre se saca algo cuando las cosas no salen como queremos, suele ser en forma de aprendizaje).

Asi que espero que este blog que empieza nos recuerde permanentemente que hay que aprovechar las oportunidades, asi no serán perdidas.

Cristina dijo...

¡Qué alegría me has dado!, me encanta que te incorpores al mundo bloguero. Sabes que te esperaba hace tiempo.

Una vez más, mis expectativas hacia ti se ven cumplidas y con creces. Te leo y es tu puro reflejo, yo ya lo conozco bien, pero es estupendo que lo hagas visible al resto del mundo. Mereces (y mucho) ser descubierto.

De oportunidades perdidas...,uff!, ¿qué te puedo decir?, en toda elección dejamos algo para coger algo, pero la cuestión es si lo que dejamos se pierde o en realidad se gana. Como dice Shidermo, hasta las pérdidas comportan un aprendizaje y sería de idiotas quedarnos siempre perdiendo, así que, si la pérdida ha sido importante, seguro que la gente inteligente aprovechará la próxima ocasión para no perder en el mismo sentido.

Partiendo del hecho de que, al decidir entre varias alternativas, siempre perdemos algo, la clave quizá está en conseguir que las ganancias acaben siendo mayores que las pérdidas.

Al fin y al cabo, la vida es un juego en el que apostamos y arriesgamos a cambio de incrementar nuestros intervalos de felicidad y donde los buenos y malos jugadores se distinguen por el balance final que consiguen entre felicidad-infelicidad. Tú y yo siempre apostamos fuerte para jugar bien y limpio, pero sabemos que a veces nos acompañan jugadores no tan buenos, quizá uno de ellos es el que te hace sentir adicto al dolor entre su cercanía y su distancia. Pero si sigues jugando bien, al final el balance siempre será positivo para ti, el otro jugador es libre de elegir su camino, incluso el de perder.

Un abrazo enorme y, de nuevo, bienvenido, bienhallado, bienquerido.

el piano huérfano dijo...

hola

una persona muy especial me explico una vez como usar las gafas , quizas con las gafas adecuadas podemos ver las oportunidades que nos viene, y no centrarnos en lo que vamos a perder, porque si ponemos la energia que la vamos a perder es posible que la perdamos.

lo mas curioso, que he aprendido en mi vida, es que las buenas oporutnidades estan cerca de ti, solo que no los ves, estas girando lo cabeza por otro lado

un abrazo

vengo del blog de cristina

el piano huérfano dijo...

always is the last change , vive el dia como la unica oportunidad