13 de octubre de 2008

Un mes, un libro


"Si le hubieran preguntado si la lectura había enriquecido su vida habría contestado que sí, sin duda alguna, aunque habría añadido con la misma certeza que al mismo tiempo la había vaciado de toda finalidad. En otra época era una mujer resuelta y segura de sí misma, que sabía cuál es su deber y tenía intención de cumplirlo todo el tiempo que pudiera. Ahora muchísimas veces estaba dubitativa. Leer no era actuar, eso era lo malo. Y a pesar de su edad era una mujer activa. Volvió a encender la luz, tomó su libreta y escribió: “No pones la vida en los libros. La encuentras en ellos.” Y se quedó dormida". Extraido de: Alan Bennett. Una lectora nada común. 2008. Anagrama. Páginas 100-101.


Poco a poco, a lo largo de estos años, mi amigo Guillermo ha ido proporcionándome lecturas con las que he disfrutado enormemente. Hace poco llegó a mis manos esta pequeña novela que narra el repentino interés por la lectura de Isabel II de Inglaterra. Guillermo me la describió como una novela hilarante llena de escenas donde uno no puede dejar de sonreír e incluso soltar alguna que otra carcajada. Terminada su lectura no puedo más que darle la razón y añadir que el personaje de la reina está tan bien construido que uno desea que la verdadera reina fuera igual que su reflejo literario. A pesar de no ser británico y tampoco amante secreto de la monarca y la monarquía, siempre me ha unido a ella una extraña relación puesto que en su presencia cinematográfica (ejemplificada en la película “The Queen”) y literaria, he vivido momentos muy especiales y “excitantes”. Tranquilos, la excitación no viene provocada por la reina. El libro lo he terminado y su lectura ha sido muy placentera, pero nunca llegué a ver el final de la película, tendré que alquilarla en dvd.
Bueno, dejando las ensoñaciones, os recomiendo el libro porque se lee en un suspiro y es un vínculo hacia otras posibles lecturas, lo que siempre es grato.

3 comentarios:

Cristina dijo...

Gracias por la recomendación, seguro que estupenda como siempre. Aunque la fotografía de la Queen como portada del libro no es muy atrayente, que digamos.
Nos dejas con la intriga de lo que pasó en esa sala de cine para no culminar el final de la película ¿?
Unos besicos.

La Petra de Cuenca dijo...

Que gran descubrimiento.Lo tiene todo divertido,entretenido y fácil de leer.

A mí tampoco me hubiera importado tener esa extraña relación con la monarca.Y vivir esos momentos tan especiales y excitantes.

Gracias Guillermo por hacernos particites de esta mágnifica novela.

Besos.

Anónimo dijo...

Lamentablemente yo si ví el final de la película (me hubiera gustado más un final "excitante" que quieres que te diga ...). De todas maneras, Stephen Frears casi siempre me gusta.
Anotada la recomendación !
Un abrazo,
MIGUEL.-